domingo, 4 de septiembre de 2011

¿Hay dos caminos diferentes? ¿Uno es verdadero y el otro falso?

…“ Allí [están] las puertas de los senderos de la noche y día”…

Es Parménides quien narra en su poema “sobre la naturaleza” que unas doncellas lo llevan a una cueva en donde una misteriosa diosa expone los dos posibles caminos de acceso al conocimiento. El primera es la vía de la verdad, contrario a la vía de la opinión. Alegóricamente representan la realidad y la ilusión, percibidos uno por la razón y otro por los sentidos.

Sin embargo: ¿De qué manera el ser humano puede saber cuál es el verdadero camino? Hay que tener en cuenta hacia dónde nos conducen estas dos vías, puesto que una es errónea. Según Parménides es aquella que sigue la mayoría de hombres y la otra es la que conduce a la verdad. Entonces si realmente queremos ir por la vía correcta, ¿debemos ir por donde van todos los demás? Es como si tuviéramos dos cabezas (Bicéfalos) una que ve el ser y otra que ve al no ser y anduviéramos confundidos por aquí o por allá, como tontos e insensatos, ciegos y sordos, sin poder darnos cuenta de nada. Pudiéramos haber seguido el camino de la apariencia, guiados solamente por los sentidos, producto de nuestra propia facultad de percibir. Así pues me pregunto ¿Acaso esa venda que tapa nuestros ojos no nos permite ver más allá sino solo oscuridad? Parménides quiere alejar al hombre de la vía sensorial, quiere hacerle perder la costumbre de dejarse dominar por los ojos, por los oídos y por las palabras. El hombre debe juzgar con la razón y considerarse con está, las cosas lejanas como si las tuviera adelante...”Las hijas del sol, después de abandonar la morada de la noche y quitados los velos de sus cabezas con sus manos se apresuraron a llevarme a la luz”…

De manera que queda el otro camino, la vía de la verdad, la única transitable. Ahora bien, si dejamos a un lado los sentidos y nos dejamos guiar por la razón ¿Cómo podríamos explicar que todo lo que pensamos es en realidad verdad? Según Parménides, todo lo que es pensable es real y todo lo real es pensable, es decir, solo lo real es expresable y es accesible a nuestra razón. Considero que esta afirmación es contradictoria ya que los Sentidos son el punto de partida para la razón y utilizándolos correctamente se llegará a este conocimiento.

En fin, para concluir Parménides nos ofrece dos vías del conocimiento: la sensación (apariencia) y la ilusión (verdad); dos realidades paralelas según lo especifica su poema. Pero en mi opinión no existen dos caminos diferentes, ya que estos se complementan el uno al otro, es decir, para llegar a la razón se necesita de los sentidos, de esta forma puedo discernir que existe o es verdadero y que no existe o es sólo una fantasía o conocimiento inadecuado.

Adriana Marcela Godoy Núñez

Baruch de Spinoza

Este es el Dios o Naturaleza de Spinoza:


Dios hubiera dicho:

" Deja ya de estar rezando y dándote golpes en el pecho! Lo que quiero que hagas es que salgas al mundo a disfrutar de tu vida.


Quiero que goces, que cantes, que te diviertas y que disfrutes de todo lo que he hecho para ti.

¡Deja ya de ir a esos templos lúgubres, obscuros y fríos que tú mismo construiste y que dices que son mi casa.

Mi casa está en las montañas, en los bosques, los ríos, los lagos, las playas. Ahí es en donde vivo y ahí expreso mi amor por ti.

Deja ya de culparme de tu vida miserable; yo nunca te dije que había nada mal en ti o que eras un pecador, o que tu sexualidad fuera algo malo.

El sexo es un regalo que te he dado y con el que puedes expresar tu amor, tu éxtasis, tu alegría. Así que no me culpes a mí por todo lo que te han hecho creer.

Deja ya de estar leyendo supuestas escrituras sagradas que nada tienen que ver conmigo. Si no puedes leerme en un amanecer, en un paisaje, en la mirada de tus amigos, en los ojos de tu hijito... ¡No me encontrarás en ningún libro!

Confía en mí y deja de pedirme. ¿Me vas a decir a mí como hacer mi trabajo?

Deja de tenerme tanto miedo. Yo no te juzgo, ni te critico, ni me enojo, ni me molesto, ni castigo. Yo soy puro amor.

Deja de pedirme perdón, no hay nada que perdonar. Si yo te hice... yo te llené de pasiones, de limitaciones, de placeres, de sentimientos, de necesidades, de incoherencias... de libre albedrío ¿Cómo puedo culparte si respondes a algo que yo puse en ti? ¿Cómo puedo castigarte por ser como eres, si yo soy el que te hice? ¿Crees que podría yo crear un lugar para quemar a todos mis hijos que se porten mal, por el resto de la eternidad? ¿Qué clase de dios loco puede hacer eso?

Olvídate de cualquier tipo de mandamientos, de cualquier tipo de leyes; esas son artimañas para manipularte, para controlarte, que sólo crean culpa en ti. Respeta a tus semejantes y no hagas lo que no quieras para tí. Lo único que te pido es que pongas atención en tu vida, que tu estado de alerta sea tu guía.

Amado mío, esta vida no es una prueba, ni un escalón, ni un paso en el camino, ni un ensayo, ni un preludio hacia el paraíso. Esta vida es lo único que hay aquí y ahora y lo único que necesitas.
Te he hecho absolutamente libre, no hay premios ni castigos, no hay pecados ni virtudes, nadie lleva un marcador, nadie lleva un registro.
Eres absolutamente libre para crear en tu vida un cielo o un infierno.
No te podría decir si hay algo después de esta vida, pero te puedo dar un consejo. Vive como si no lo hubiera. Como si esta fuera tu única oportunidad de disfrutar, de amar, de existir.
Así, si no hay nada, pues habrás disfrutado de la oportunidad que te di.
Y si lo hay, ten por seguro que no te voy a preguntar si te portaste bien o mal, te voy a preguntar ¿Te gustó?... ¿Te divertiste?... ¿Qué fue lo que más disfrutaste? ¿Que aprendiste?...
Deja de creer en mí; creer es suponer, adivinar, imaginar. Yo no quiero que creas en mí, quiero que me sientas en ti. Quiero que me sientas en ti cuando besas a tu amada, cuando arropas a tu hijita, cuando acaricias a tu perro, cuando te bañas en el mar.

Deja de alabarme, ¿Qué clase de Dios ególatra crees que soy?
Me aburre que me alaben, me harta que me agradezcan. ¿Te sientes agradecido? Demuéstralo cuidando de ti, de tu salud, de tus relaciones, del mundo. ¿Te sientes mirado, sobrecogido?... ¡Expresa tu alegría! Esa es la forma de alabarme.

Deja de complicarte las cosas y de repetir como perico lo que te han enseñado acerca de mí. Lo único seguro es que estás aquí, que estás vivo, que este mundo está lleno de maravillas. ¿Para qué necesitas más milagros? ¿Para qué tantas explicaciones?
No me busques afuera, no me encontrarás. Búscame dentro... ahí estoy, latiendo en ti.
Spinoza



lunes, 20 de septiembre de 2010

BIENVENIDAS


Un cariñoso saludo a todas las estudiantes y visitantes de este blog. El quehacer filosófico en nuestra Institución Educativa debe tener un espacio en la red donde puedan publicarse trabajos de docentes, directivos, administrativos y, por supuesto, las expresiones de todas y cada una de las estudiantes. Al iniciar este espacio cibernáutico esperamos desde el área de filosofía del Cole, brindar un canal de comunicación que facilite la expresión de las ideas, desde las distintas formas comunicativas, enmarcadas en el más profundo respeto a la dignidad humana, de la cual ha sido garante el quehacer filosófico desde los tiempos de los griegos.